Un abril lluvioso, volvía de una clase de guitarra y mi profesor, que no era para nada del estilo de
Stevie Ray Vaughan, me preguntó si había escuchado alguna vez lo que hacía. Me hablaba en chino: Stevie what? Da igual, tú date una vuelta más larga de lo habitual para llegar a casa y te lo pones a todo trapo en el coche. BOOM.
Mi camino, habitualmente duraba entre 10 y 12 minutos, dependiendo del tráfico. Ese día tardé exactamente 38 minutos y 52 segundos, lo que dura el
Texas Flood. Sí, ese sonido lo había escuchado antes, el rollo me era familiar, pero ¿qué coño era lo que hacía este tío?
1.
Love Struck Baby – yo qué sé, si es que es una maravilla. Si un disco empieza así, solo puede ser una locura. Y, ¿esto lo hace solo con una guitarra, un bajo y una batería? Pues sí, amigo, prepárate.
“Life without you darlin' is a solid mess”
2. Pride and Joy
– aunque esta canción le haya perseguido siempre -y lo seguirá haciendo por los siglos de los siglos-, no es su mejor tema, lo que no quita que sea un brutalidad. Guitarras sucias y limpias, silencios que emocionan, un ritmo machacón, pero efectivo. Pero esos solos… ESOS SOLOS. Ok, la letra no es nada del otro mundo, pero estamos hablando de la influencia del blues.
“She's my sweet little thing, she's my pride and joy
She's my sweet little baby, I'm her little lover boy”
4.
Tell me – Blusaco. Sutileza y buen gusto. Si lo escucha
Robert Johnson igual le mete un guitarrazo, pero seguro que ahora tocan los dos juntos para pasar las penas del infierno.
“Yes I wonder sometime....
How long my trouble gonna last”
5. Testify
– Primera instrumental del disco. Le da igual tocar sobre una escala de blues, que plantarte una mixolidia y romperte los esquemas. Tiene una nota desafinada, eso es todo lo que tengo que criticar, estoy esperando el día en el que una nota desafinada de mi guitarra suene como esa.
6. Rude Mood
– si te has cansado de la instrumental anterior, apaga el disco. Si, como sospecho, no te has cansado, aquí tienes un blues shuffle que a punto estuvo de dar la sorpresa en los Grammy
como mejor canción instrumental de rock, pero ese año se llevó el gato al agua Sting.
7. Mary Had a Little Lumb
– una revisión de un cuento que, como la mayoría de cuentos, no tiene ni pies ni cabeza. Hay un momento del solo que me parece absolutamente memorable.
“He followed her to school one day
Which broke the teachers cool
But what a time did they have
That day at school”
8. Dirty Pool
– juego de muñeca de esos que te provocan agujetas en el antebrazo. En serio, con una púa media y una strato al hombro… ¿quién es este superhéroe?
“I'm turnin' the tables on you
You've been playin' dirty pool”
9. I’m Cryin’
– sí, es igual que Pride and Joy, pero es que es su puñetero estilo. Compara los solos y échate a llorar.
“when I first met you baby at a dance and we did fine
But now that we're together, yeah it's a total waste of time”
10. Lenny
– la joya de la corona, hay que esperar 33 gloriosos minutos de disco para llegar a un pasaje que pone los pelos de punta. Un instrumental que quita el aliento. Se la dedicó a su mujer, no me imagino lo que tenía que quererla… si tocas de ese modo no necesitas ni letra.